Por César-Javier Palacios de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente (@fundacionfrf)
Llevo un par de semanas viviendo en Londres, una
multicultural metrópoli con más de 8 millones de habitantes. Por eso me he
quedado asombrado al leer hoy en el metro el periódico. En el centro mundial de
la vida urbana se dedican dos páginas completas al mundo rural. El título del
reportaje es casi provocador: ¿Te imaginas ser agricultor en el futuro?
En el artículo se habla de la importancia de la agricultura
y la ganadería, de la soberanía alimentaria, de la frescura de los alimentos de
cercanía, del mantenimiento del paisaje, pero también se habla de moda. Porque
al margen de lo bien que se pueda vivir con este trabajo, de la satisfacción
personal de trabajar la tierra con tus propias manos y alimentar a tus vecinos,
hoy a los jóvenes no les parece cool, moderno, ser agricultor. Está muy bien
calzarse unas botas de agua para ir de fiesta, pero no lo es tanto usarlas para
trabajar.
Un reciente estudio revela que sólo el 4% de los estudiantes
del Reino Unido considera la agricultura como una posible salida profesional.
En un país que en los próximos 10 años necesitará 60.000 nuevos trabajadores
agrícolas sólo para cubrir las jubilaciones y necesidades laborales del sector,
la noticia sorprende.
Aquí los ingleses, que son muy suyos, cada vez dan más valor
a consumir productos y variedades locales. En apenas un año la importancia
económica del sector ha aumentado un 25%. Y esto es así porque, frente a
nuestro generalizado abandono de los productos locales, aumentando la
dependencia alimentaria con el exterior, en el Reino Unido cada vez son más
autosuficientes. En apenas 25 años han pasado de un magro 15% al actual 60%. Y
siguen creciendo en independencia.
Atraerse a la gente joven. Hacerles ver el futuro de una
profesión con mucho futuro. En esta decidida apuesta por la agroindustria local
se han lanzado a una curiosa campaña que es la que hoy me ha sorprendido en los
periódicos. Es el Farmers Apprentice. Un superconcurso de jóvenes aprendices de
agricultor, en plan Gran Hermano pero con mensaje. El ganador recibirá 10.000
libras, dinero con el que podrá iniciarse en la profesión.
Y algo todavía más sorprendente ¿Saben quién es el esponsor
principal del concurso? No se lo van a creer: McDonalds. Porque en este país de
asombro, hasta las grandes multinacionales de la alimentación apuestan por lo
local, pues los consumidores, como no podía ser de otra manera, así lo exigen.
Conducir un tractor siempre será conducir un tractor, por
muy de moda que sean las gafas que llevas. Aunque con esto de las tendencias,
quién sabe, a lo mejor en un futuro todos querremos tener uno. El toque cool ya
lo tiene un sector donde aún los jóvenes pueden encontrar trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario